Retablo Mayor
El retablo de la iglesia fue realizado por Lucas Formente en 1565. Consta de predela, dos cuerpos divididos en cinco calles, estando las laterales ligeramente desviadas y un frontón curvo, que a modo de ático, corona el conjunto.
La calle central no pertenece al retablo primitivo. Se trata de un añadido rococó (1767) formado por un sagrario expositor y un habitáculo destinado a albergar la imagen de La Asunción, advocación a la que está destinado el templo.
Las calles laterales fueron pintadas en el S.XIX, siguiendo el gusto de la época (imitando mármoles) lo que hizo desaparecer parte de la obra de Formente. También se cubren con yeso las estrías y grutescos de las columnas y pilastras, y se añade el guardapolvos decorado con casetones.
Debido a esta desafortunada intervención solo se conservan las pinturas del banco o predela, donde son representados los Apóstoles, y algunas tallas de bulto redondo.
Dedicada a la Asunción, se encuentra sobre una barbacana, en lo alto del pueblo. Su cronología constructiva abarca distintos periodos artísticos desde la E. Media hasta la E. Moderna. Consta de un ábside semicircular románico con tres contrafuertes en el exterior y cuerpo rectangular dividido en tres naves, siendo la central más ancha que las laterales que fueron añadidas en el S.XVI. Están separadas por pilares de sección rectangular. La central se cierra con armadura de madera, mientras que las laterales se cubren con bóveda de arista y el presbiterio con bóveda de horno. El acceso al templo se realiza por las fachadas norte y sur.
